LAS CLARISAS LLEGARON A VILLARROBLEDO
EL DÍA 12 DE MAYO DEL AÑO 1614.
A finales del siglo XVI vivía en
Villarrobledo un matrimonio acaudalado que tenía dos hijas jóvenes. Él, D. Juan
Cano Moragón, era el regidor de la Villa, lo que hoy conocemos con el nombre de
alcalde. Ambos tenían propósito de
fundar un convento de frailes carmelitas, pero D. Juan falleció prematuramente
en 1602, sin haber logrado su deseo. Su esposa, Dña. Ana Ruiz de Palomera,
mujer de gran piedad, quiso llevar a cabo los deseos de su marido. En 1605 pide
al ayuntamiento de Villarrobledo licencia para la fundación de un convento de
Carmelitas. (Se conservan estos documentos en el archivo municipal). Pero el
permiso no se le concede, pues ya hay otros religiosos en el pueblo, los
franciscanos, que todavía no han terminado las obras de su convento. La
fundadora espera unos años y decide fundar un convento de clarisas recoletas.
La escritura definitiva de la Fundación se entrega el 28 de Noviembre de 1607
(Dato sacado de las Crónicas del P. Ortega). Después de los debidos trámites,
permiso del Consejo Real de Madrid (14-VIII-1607) y de Roma (27-II-1611), el
Monasterio abre sus puertas el 12 de Mayo de 1614. Pronto vinieron jóvenes de
Villarrobledo y de otros lugares. La primera novicia entró en el mes de Agosto
y fue la Venerable Sor María de San Antonio, llegó a ser abadesa y murió con
fama de santidad.
Dña. Ana fallece en 1622, tal como
aparece en su lápida sepulcral, dos años antes de que se finalizaran las obras
de la iglesia en 1625.
En las crónicas del P. Ortega, hemos encontrado datos muy
interesantes y desconocidos sobre nuestro Monasterio y sobre el pueblo de
Villarrobledo. Sorprendentemente el más nombrado en estas crónicas por la
santidad de las personas de las tres órdenes franciscanas.
“Por estos tiempos, en que camina
nuestra Crónica, parece que el Altísimo había echado su bendición en este
pueblo de Villa-Robledo, que cae en le Mancha, y pertenece al Arzobispado de
Toledo: pues en todas las tres Ordenes de N. P. S. Francisco, había muchas
personas, no solo de buenas costumbres, si adelantadísimas en el camino del
Espíritu, y trato interior: todas las cuales irán ocupando por su orden, el
lugar que les pertenece en esta Historia.” (Parte Segunda. Lib. I. Cap. XVI.
Pg. 39) Texto adaptado del castellano antiguo.
“La Ven. Madre y gran sierva de Dios Sor María de San Antonio, fue la
primera que vistió el hábito religioso
en el reformadísimo Monasterio de Santa Clara de Villa-Robledo, tantas veces
nombrado en esta Crónica” (Parte III. Lib. I, Cap. VI. Pg. 12)
PARA FESTEJAR TAL EFEMÉRIDES TENDREMOS UNA EUCARISTÍA SOLEMNE EN LA QUE TAMBIÉN DAREMOS GRACIAS A LOS BIENHECHORES QUE HAN COLABORADO EN LAS OBRAS DE RESTAURACIÓN DEL TEJADO
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